La Embajada de Hungría en la Ciudad de México celebró su fiesta nacional en conmemoración de la revolución de 1956 con la participación de la comunidad húngara local, diplomáticos, representantes de la vida cultural, académica, empresarial, y funcionarios del gobierno. En su discurso inaugural, el Excmo. Iván Medveczky subrayó que hoy estamos viviendo en el presente que comenzó con el cambio de régimen en 1989 y que no se haya podido llevar a cabo sin los héroes de 1956. El anfitrión de la celebración, terminando su misión como embajador, se despidió de la comunidad local, agradeciendo el trabajo de los últimos años, y enfatizando que – aparte de la rica cultura, comida y belleza de México, lo que más extrañará es el cariño, la amabilidad y la hospitalidad de su gente. Bernardo Aguilar Calvo, el Director General para Europa del SRE recordó la historia de la asociación húngaro-mexicana y los acontecimientos del ’56.
Después de la inauguración, el embajador Iván Medveczky y el escultor Pál Kepenyes colocaron una corona sobre el monumento de bronce de la revolución, que se encuentra junto a la embajada, hecha por el mismo artista húngaro para el 60 aniversario de la revolución; mientras que los invitados pudieron disfrutar de la exposición "30 años de libertad" y el cortometraje de Szonja Szabó, los "Partisanos".